lunes, 13 de abril de 2009

PINTURA BARROCA. FLANDES

En el siglo XVII se produce una escisión entre Flandes y Holanda. Flandes bajo dominio español, sigue siendo católico y Holanda se aparta del sur y del catolicismo.
Centro de la pintura de esta época en Flandes es:

PEDRO PLABLO RUBENS
Durante ocho años vivió en Italia, viajando por el país y saliendo al extranjero –entonces hizo su primera visita a España- al servicio del duque de Mantua.
De Miguel Ángel adquiere la ampulosidad de la forma, la composición dramática; de los venecianos el color, la pincelada amplia, el gusto por la mitología; de los boloñeses, la gran composición. Tiziano, con su color cálido y sus bellos desnudos, estuvo siempre presente en los pinceles de Rubens.
Fueron discípulos suyos y colaboradores Van Dyck y Jordaens.
Abarcó todos los géneros:
Temas religiosos: De su taller salió una enorme cantidad de cuadros de asunto devoto. Dotados del dinamismo y la espectacularidad que tan bien iban con los deseos triunfales de la Iglesia de la Contrarreforma, alcanzaron un enorme éxito. Entre ellos destacan el “Descendimiento” de la Catedral de Amberes, la “Adoración de los Magos” del Museo del Prado.
Temas mitológicos: Estos temas le sirvieron para profundizar en el conocimiento y estudio de la anatomía masculina y refleja su gusto por un muy característico tipo de desnudo femenino: opulento, muy sensual, casi desbordado y de carnes blancas y nacaradas. Destacan “Las tres gracias” y “El Juicio de Paris”.
Retratos: de tipo cortesano, con gran atención a la apariencia externa de los personajes, tal como habían iniciado los pintores venecianos del siglo XVI. Ejemplo de ello es el retrato de “María de Médici” del Prado. También dejó fijado un tipo de retrato ecuestre en que caballo y jinete aparecen de cara al espectador, como el del “Duque de Lerma” en el Prado.
Temas de género: Destacan los de ‘costumbres’, en los que refleja magníficamente la alegría del espíritu del pueblo como “Danza de aldeanos” en el Museo del Prado.
Paisajes: En ellos hierve la naturaleza, se retuercen los troncos, nubes y resplandores. Creó los jardines del amor, germen de las fiestas galantes de WATTEAU.
Temas de caza: En éstos se mostró como un profundo conocedor de la forma y del movimiento en tensión de los cuerpos de los animales.
Aspectos técnicos de su pintura:
El dibujo: Es seguro y
muy enérgico. Esto se puede apreciar en los cuadros y en los múltiples bocetos que nos han quedado.
El color: Fue rico y suntuosos, fundamentalmente por la influencia del esplendoroso colorido de la escuela veneciana –Tiziano sobre todo-, cuyas obras conoció de cerca en sus años en Italia.
La composición: Siempre son concepciones muy monumentales, muy ricas de figuras y ampulosas en las formas. Generalmente aparece ordenada sobre un esquema diagonal, como si un invisible eje inclinado vertebrara y organizara toda la disposición de la escena.